Nuestros amigos de Limandarina, Expertos en Seguridad Alimentaria y Productos de Consumo; nos comparten un excelente artículo sobre la miel, su producción, mercado y también algunos mitos.
¡Los invitamos a seguir todos sus contenidos de cerca!
La miel
Introducción
La miel es un alimento reconocido mundialmente por su poder edulcorante, no obstante, posee más propiedades que se han ido conociendo con el paso de los años y el estudio de la apicultura.
El néctar es la principal materia prima de la miel. Es recogido por las abejas de las flores y de otras partes de las plantas y lo depositan en las celdillas de la colmena, para posteriormente taparlo, formando un opérculo.
La miel es un alimento compuesto principalmente por carbohidratos. Cabe destacar que gran parte de estos azúcares se encuentran pre-digeridos y, por lo tanto, son fácilmente absorbibles por nuestro organismo.
Producción
La miel se obtiene gracias a la apicultura, actividad dedicada a la crianza y cuidado de las abejas para poder aprovechar los productos naturales. Aunque aparentemente, la apicultura se siga desarrollando a día de hoy y se descubran nuevas técnicas para mejorar las prácticas, es una actividad que data de la época Egipcia, en donde se pensaba que la miel provenía de las lágrimas del Dios Ra y era usada como parte de ofrendas; apareciendo en numerosos grabados y papiros.
Actualmente, tras muchos años de investigación, se ha optimizado el proceso de recolección, hemos clasificado la miel en diferentes tipos según su procedencia e incluso hemos podido establecer unos criterios de calidad específicos; pero hay algo que no ha cambiado: Su producción.
Las abejas siguen produciendo la misma miel que nos enseñaban nuestros antepasados mediante pinturas rupestres y hay algo que está claro, sigue siendo un producto muy valorado y cotizado entre sus consumidores.
A grandes rasgos, las abejas absorben con su lengua el néctar de las flores, lo introducen en su buche y vuelven a la colmena, donde se lo entregan a las obreras jóvenes, las cuales reducen la humedad del néctar desde un 60% hasta un 18% aproximadamente mientras los mezclan con encimas que ellas mismas segregan. Cuando las abejas determinan que la miel ha alcanzado el grado óptimo de maduración, sellan el panal. El sello es el indicativo del apicultor de que ya pueden recolectar la miel.
La colmena funciona como una industria alimentaria a pequeña escala, cada insecto tiene una función, existe una jerarquía y realizan procesos dignos de cualquier fábrica actual. ¿Sabías que, entre otros procesos, las abejas cuentan con un sistema de refrigeración? Así es, cuando se eleva la temperatura en la colmena, las abejas agitan enérgicamente sus alas para enfriar su pequeña fábrica.
¿Miel recolectada o importada? Mercado nacional vs importación
En la actualidad la compra/venta de mieles es un sector en decadencia. La escasez de compradores a nivel nacional conlleva una falta de liquidez y una incertidumbre insostenible para el apicultor. Por esta razón, en España se importa mucha más miel de la que exportamos. La miel procede de países como China, Argentina, Ucrania o Rumania, que nos ofrece la miel a un precio inferior al de la fabricación nacional.
La mayoría de grandes superficies opta por mieles de importación para sus lineales. Son más baratas y aparentemente, son mieles similares a las nacionales. Es por ello por lo que los apicultores luchan por un etiquetado más claro. De esta manera, se cree que se podrá competir y defender el consumo de la miel nacional y darle más valor a un producto que lo tiene, puesto que la mayoría de las mieles nacionales son de una calidad excelente.
Mitos alrededor de la miel. Unos verdaderos y otros falsos
¿Existe adulteración en la miel? La respuesta es sí, pero no toda la miel que consumimos está adulterada. Entre el año 2016 y 2017 se analizaron 2.264 muestras de miel (163 Españolas), de las cuales, sólo un 6% no cumplía los límites legales o los estándares de calidad europeos.
La miel es el tercer producto más adulterado del mundo según un Informe del Parlamento Europeo, principalmente por adición (jarabes de azúcar o glucosa, más baratos) o sustracción de sustancias, o secado fuera de la colmena. Para poder determinar la pureza de la miel es necesario un equipo profesional y un laboratorio.
Actualmente, el sector nacional necesita apoyo. Producimos una miel de calidad superior y no la valoramos, de hecho, la subestimamos con falsos mitos. No hay que dejarse engañar por todo lo que escuchamos o leemos en las noticias.
Debemos de impulsar el consumo local, la profesionalización del sector y la mejora del etiquetado.
Los productores de miel están luchando por conseguir una mayor transparencia en el etiquetado de la miel, que indique el % de miel de cada origen geográfico que compone el producto, así como que en productos elaborados que lleven miel en su composición, se indique el % de la misma o bien el % de azúcares procedentes de la miel en la composición final del alimento.
Artículo original: «La miel»
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Autor
Daniel Cataluña Sanz
Limandarina es una empresa nacida en 2008, formada por un equipo de profesionales dinámicos y expertos en Calidad y Seguridad Alimentaria. Cuenta con amplia experiencia en consultoría enfocada al sector agroalimentario y de productos de consumo.
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