Los ataques cibernéticos se encuentran entre las principales amenazas novedosas para las empresas de alimentos, según se empieza a dar cuenta la industria alimentaria. Ya en marzo del 2015 me he tenido que volver a casa de una auditoría de certificación en FSSC22000 en una empresa de flavours ya que habían bloqueado el sistema informático (gestionan las formulas de Baileys entre otras); por lo que no es un tema nuevo para algunos, desgraciadamente.
Hoy por hoy se entiende que el término «defensa alimentaria» se usa de manera demasiado restringida. También así lo ha entendido BRCGS, en su V8, en la Guía de Interpretación, detalla que: “Las áreas sensibles o restringidas, es probable que sean las más vulnerables; la vulnerabilidad del producto envasado dependerá de la naturaleza del envase. Los detalles de los sistemas de IT y la protección de datos también deben incluirse en la evaluación.”
La defensa alimentaria se encuentra en un grupo de temas que incluyen la democracia alimentaria, el control alimentario, la autosuficiencia alimentaria, la resiliencia alimentaria, los riesgos alimentarios, la capacidad alimentaria y la soberanía alimentaria. Diferentes perspectivas compiten por el espacio político, como la salud pública, militar, legal, desarrollo sostenible, conductual y social.
La logística moderna tiene que ver con el “JIT” (just in time) y los satélites. Interrumpir eso es una forma de interrumpir el suministro de alimentos de una nación. Todos son argumentos para decir que la defensa alimentaria debe tener un elemento social.
Sabemos que las enfermedades cruzan fronteras desde hace mucho tiempo, pero lo que es nuevo es un sistema más complicado de distribución de alimentos y la infraestructura no se ha mantenido actualizada al mismo nivel de protección. La respuesta es una mejor cooperación internacional. El potencial de que los alimentos se utilicen como arma está por delante de nuestros enfoques regulatorios, aunque la FDA, a través del FSMA ha hecho esfuerzos para actualizar la Ley de Bioterrorismo (que existe desde el 2003), y seguir alarmando sobre este punto débil.
Siempre existe una tendencia a decir que se trata de un individuo en particular, una empresa mal administrada o una capacitación deficiente. Ahora más que nunca se necesita mirar el sistema en su totalidad y repensar el abanico del Food Defense, su alcance.
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Autora
Leila Burin.
Coordinadora Académica de Portal de Inocuidad.
PhD en Ciencias Químicas, Universidad de Buenos Aires, 2001 y Lic. en Ciencias Biológicas, Universidad de Buenos Aires, 1994.
2010 hasta la fecha: auditora para SAI Global Spain: Esquemas: IFS, BRC, ISO 22 000, FSSC 22000, GMA SAFE y auditorías de clientes: Unilever, Pepsi, Starbucks, Woolworths, Mac Donalds.
1997 hasta la fecha: QualyFoods S.A., Argentina Cargo: Gerencia Técnica en Aseguramiento de Calidad. Dirección. Desarrollo de Programas de Pre-requisitos & BPM y HACCP en Argentina (8 Plantas); capacitación: HACCP Alliance Lead Instructor en Argentina y México; y auditora para Heinz NA.
Mas de 15 cursos abiertos dictados desde 2001. Docencia: Materia: Biología e Introducción a la Biología Celular. Unidad Académica: CBC (Ciclo Básico Común), UBA, entre 1993 y 2000.
2 DIRECCIONES DE TESIS, entre 2001 y 2006.
14 PUBLICACIONES Y ARTÍCULOS.
18 TRABAJOS PRESENTADOS A CONGRESOS.
Más de 35 CURSOS TOMADOS desde 1994.
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